LOS RECORTES DE LOS VIERNES

Bueno, ¿pero qué está pasando aquí? ¿Cómo que todos los viernes un recorte social nuevo? ¿qué pasa, que los improvisan? ¿O se trata de una especie de juego macabro o método de tortura lenta? ¿Es una burla? ...Y si tienen los recortes ya preparados, ¿no pueden anunciarlos todos de golpe, comunicar un plan, un proyecto? ¿Es que es mejor ocultarlos? ¿Por qué? ...Eso de decirlos de a poco a poco, ¿no recuerda acaso a los castigos que se da a los presos a los que no solo se quiere castigar, sino también reducir y humillar hasta anularlos completamente? Cada vez está más claro que quienes nos gobiernan se comportan con nosotros, los gobernados, como auténticos enemigos... O peor.

Bueno, pues ya está bien, a partir de hoy yo también me comprometo a escribir y publicar en este blog CADA VIERNES un poema contra los recortes sociales y contra la política despótica de todo signo que nos rodea.

Y no solo eso: animo a quien le apetezca a que se una a esta inicitiva vehemente que se me acaba de ocurrir, que no sea yo solo el único loco. Que cada viernes internet se llene de poemas contra los recortes sociales, contra la política neoliberal, contra el capitalismo, etc. Y no, no hay que apuntarse en ningún lado, ni darse de alta ni por supuesto abonar ninguna cuota... Simplemente: respondamos a los ataques con ingenio y arte. Y con más cosas. Pero de momento con ingenio y arte.

Y tampoco vamos ahora a ser estrictos: si prefieres responder a esta política agresiva con un texto en prosa o de género híbrido o inclasificable también vale, no tiene porque ser algo catalogado de "poesía", ni siquiera ha de ser catalogado de nada. Lo único que sí me atrevo a pedir es que si por el motivo que sea estás leyendo esto y vas a sumarte a esta idea y no tengo tu blog enlazado, me dejes un comentario para poder seguirte y de esa manera conseguir, poco a poco, crear un red de resistencia poética (o algo así). O yo qué sé... Si prefieres participar sin decir nada pues también lo veo bien, la verdad. Da igual.

Aviso: esto no tiene ni base ni rumbo, porque estaba oyendo la radio, me he indignado y me he puesto a escribir esta entrada a lo loco. Veremos qué pasa, será lo que tenga que ser, no hay nadie detrás de esta iniciativa sino yo mismo, por lo que estoy preparado para llevarla a cabo yo solo si es preciso. Hasta que me canse, me aburra, me parezca que es mala idea o me detengan. Pero claro, me encanta la compañía, así que por eso digo: únete, vamos juntos...

Y para empezar, como me da apuro empezar con algo propio voy a colocar aquí un poema que me encanta y que está escrito por Jaime Gil de Biedma, familiar directo de, precisamente, doña Esperanza Aguirre Gil de Biedma, ínclita presidenta de la Comunidad de Madrid y férrea defensora de los recortes en sanidad, educación y todo lo que sea público en general (¿aún queda algo público en Madrid? ¿Y no es su cargo un cargo público susceptible por tanto de ser recortado, por ejemplo?)... Pero basta ya de preguntas: Acción. El poema al que me refiero se llama APOLOGÍA Y PETICIÓN y está escrito durante la dictadura franquista. Desde mi punto de vista sigue siendo válido:

¿Y qué decir de nuestra madre España,

este país de todos los demonios

en donde el mal gobierno, la pobreza

no son, sin más, pobreza y mal gobierno,

sino un estado místico del hombre,

la absolución final de nuestra historia?

De todas las historias de la Historia

la más triste sin duda es la de España

porque termina mal. Como si el hombre,

harto ya de luchar con sus demonios,

decidiese encargarles el gobierno

y la administración de su pobreza.

Nuestra famosa inmemorial pobreza

cuyo origen se pierde en las historias

que dicen que no es culpa del gobierno,

sino terrible maldición de España,

triste precio pagado a los demonios

con hambre y con trabajo de sus hombres.

A menudo he pensado en esos hombres,

a menudo he pensado en la pobreza

de este país de todos los demonios.

Y a menudo he pensado en otra historia

distinta y menos simple, en otra España

en donde sí que importa un mal gobierno.

Quiero creer que nuestro mal gobierno

es un vulgar negocio de los hombres

y no una metafísica, que España

puede y debe salir de la pobreza,

que es tiempo aún para cambiar su historia

antes que se la lleven los demonios.

Quiero creer que no hay tales demonios.

Son hombres los que pagan al gobierno,

los empresarios de la falsa historia.

Son ellos quienes han vendido al hombre,

los que le han vertido a la pobreza

y secuestrado la salud de España.

Pido que España expulse a esos demonios.

Que la pobreza suba hasta el gobierno.

Que sea el hombre el dueño de su historia.

APOLOGÍA Y PETICIÓN - Jaime Gil de Biedma

Y el viernes que viene otro poema denuncia, y el próximo otro, y luego otro, y así....