ayer pasé de nuevo por delante
iba solo por la calle san bernardo y he llegado
otra vez
otra vez
ante su puerta
ante la puerta de aquel bar
junto a metro noviciado
junto a metro noviciado
era de noche no muy tarde
como digo estaba solo
como digo estaba solo
la gente se cruzaba en mi camino como entes como acaso
las fichas de algún juego que no tiene ni reglas ni
principios
pero en el que todos participan e intentan ganar algo
yo no gano nada últimamente
pero bueno como digo estaba ante las puertas de cristales de aquel bar
junto a metro noviciado
seguro que recuerdas este sitio del que hablo
esta vez no pude entrar no estaba abierto
un reja me impedía aquel acceso
los cristales cubiertos de papeles las luces apagadas
y era cierto
está cerrado
y dentro ya no había
ni rastro alguno de personas ni de vida
está cerrado
y dentro ya no había
ni rastro alguno de personas ni de vida
y me ha parecido tan curioso y tan extraño
que no he podido evitar buscar algún detalle
alguna pista alguna cosa que me explique
qué ha podido pasar en este tiempo
alguna pista alguna cosa que me explique
qué ha podido pasar en este tiempo
y he intentado acercar mi cara de enrejado hacia la reja
y he intentado mirar dentro pese a la tapia de papeles
y he movido el cuello por si acaso hallaba un hueco grande
pero no había luz y no veía casi nada
me ha dado lo mismo
pero no había luz y no veía casi nada
me ha dado lo mismo
me he quedado igualmente mirando los rincones oscuros de
aquel antro
así he estado como absorto un rato largo
como queriendo ser fantasma y pasar dentro
atravesando la reja
los papeles
los cristales
como queriendo ser fantasma y pasar dentro
atravesando la reja
los papeles
los cristales
a todo esto un par de chicas me miraban
pensando de seguro qué tío tan extraño
qué coño mira en este sitio y a estas horas
pensando de seguro qué tío tan extraño
qué coño mira en este sitio y a estas horas
qué buscará qué habrá dentro verá algo??
pero todo esto me lo invento porque no me han dicho nada
se han marchado
pero todo esto me lo invento porque no me han dicho nada
se han marchado
la gente caminaba por la acera los coches respetaban los
semáforos
otros bares se abrían a la calle
otras tiendas sugerían con neones en sus puertas
yo tenía algo de frío
bueno
en realidad estaba helado
otras tiendas sugerían con neones en sus puertas
yo tenía algo de frío
bueno
en realidad estaba helado
pero y qué
así estuve hasta que me he visto impedido de hacer nada
para entonces aquellas chicas
hacía ya un buen rato que pasaron
y suponía que nadie habría cerca
que nadie rondaría ya la entrada tan pequeña y tan cerrada de metro noviciado
entonces me he girado y he visto una pareja
así estuve hasta que me he visto impedido de hacer nada
para entonces aquellas chicas
hacía ya un buen rato que pasaron
y suponía que nadie habría cerca
que nadie rondaría ya la entrada tan pequeña y tan cerrada de metro noviciado
entonces me he girado y he visto una pareja
y se besaban
se besaban ambos con dulzura junto aquella salida diminuta
de metro noviciado
y he mirado cómo se querían y luego he mirado hacia otro lado
otra vez hacia el mismo bar cerrado
y entonces me he sentido extraño
sí
extraño
tan extraño
extraño
tan extraño
era todo muy extraño
y bueno y yo qué sé
pues poco más pues eso es todo
lo que ya te he dicho
que ya cerró aquel bar
aquel bar que me trae tantos recuerdos
aquel bar
junto a metro noviciado
y bueno y yo qué sé
pues poco más pues eso es todo
lo que ya te he dicho
que ya cerró aquel bar
aquel bar que me trae tantos recuerdos
aquel bar
junto a metro noviciado
Creo que es el mismo sitio al que íbamos hace cosa de 20 años una amiga y yo y en el que había un camarero que era clavadito al Furillo, por su gran parecido con el prota de Canción triste de Hill-Street.
ResponderEliminarEstuve hace cosa de menos de un año y aproveché, cuando se encontraba de compadreo con otro cliente, a hablar con él y me contó que su compañero se había jubilado hace unos meses, el que siempre estaba liándola. Furillo me dijo que dentro de poco, en el abril de este año que acaba, se jubilaba él también, pero no se iría a Miami, lugar que mentaba siempre que quería escapar de la plancha, los bocatas, el trajín con las botellas, sino a su pueblo, ¿a dónde si no?
Bueno, un saludo Antonio.