viernes, 2 de septiembre de 2011

MILLONARIA MUERTE

Hace algún tiempo me contaron la historia de un millonario argentino (lamentablemente no recuerdo su nombre) quien, para escapar de la justicia y salvar su fortuna, fingió su propia muerte de la siguiente manera: contrató a un hombre de características físicas similares a las suyas, le disfrazó con su ropa y le introdujo su documentación en el bolsillo. Después de matarlo, le desfiguró el rostro y las huellas dactilares hasta quedar irreconocible. Por último, abandonó su cadáver a la intemperie para que lo encontrara la policía y se pudiera así certificar su defunción... Al millonario se le supone vivo y a salvo, disfrutando de sus millones por muchos años bajo otra identidad... 


Además, y según me contaron, la situación económica en el país era tal que no sería nada extraño que el muerto se hubiera prestando voluntariamente a esta farsa a cambio de un poco de dinero. Todo, hasta la muerte, tiene un precio y ya que hay que morir, que sea a cambio de un poco de dinero. O visto de otra forma: si tienes dinero puedes comprar, literalmente, la vida de los demás. Esta historia debo reconocer que me impacto bastante. También la oscura y sórdida muerte de Ramón Mendoza, ex presidente del Real Madrid, en las Islas Bahamas y otras muertes típicas de millonarios rondaban en mi cabeza cuando escribí, hace ya algunos años, este poema...


morir ahogado
con la boca llena de billetes
morir como un mafioso
o como un alcalde
morir en mi mansión
en mi hospital privado
morir tiroteado por mis propios guardaespaldas
morir estrellado en limusina
en avioneta
por sobredosis de pastillas
morir follando
con una hermafrodita tailandesa
en un hotel muy caro
morir fingiendo que me han matado
morir de éxito
arruinado
dejando toda mi herencia
a mi tercer esposo coreano
morir en extrañas circunstancias
morir como buen señor:
traicionado o traicionando

7 comentarios:

  1. Me sugieres lo que sigue:


    Muertes invisibles en Sur que subsiste

    programadas muertes,

    muerte en intento, tiburón feliz

    nadie es ilegal,

    luego aquí unos pocos, muerte lenta

    miseria bajo mileurista

    y bastantes muertes por obsolescencia, dictada a pantalla

    son los vivos muertos,

    pero yo decanto a muerte que revienta

    se levanta grita

    NOOOOO y se muere


    Salud
    Un abrazo

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  2. un abrazo rafael, gracias por tu inspiración y por querer compartirla conmigo, es un honor

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  3. un placer verte/oírte/rozarte/casi-olerte/no-saborearte en el riff
    salud

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  4. bonitos verbos, pero... no probaste a hablarme? no sé si nos llegamos a conocer :-), la próxima vez, espero... de momento te enlazo y te sigo, salud!

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  5. Creo que el empreseraio argentino del que hablas es Yabrán. Esto sucedió hará unos 13 años o así... Y, lamentablemente, sospecho que la lista es bastante más larga.

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  6. Una muerte millonaria y muertos a millones, nos fallan las cuentas.

    Un saludo.

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